Cómo hemos cambiado...
En una década, esos pequeños amigos inseparables, y ahora ya incluso vitales, llamados móviles, han cambiado y mucho...
La verdad es que entré un poco tarde en el mundo de la telefonía móvil, exactamente en diciembre del año 2002, cuando ya contaba 20 años de edad. Y me inicié con el modelo Siemens c45, cómo me gustaba el tacto de sus teclas blanditas y lo ergonómico que era.
No recuerdo cuando jubilé mi primer móvil y me hice con el segundo, un Siemens c65 la mar de vistoso. Estaba tan satisfecha con la marca Siemens que no dudé en hacerme con otro de la casa. Flipaba con los colores de la pantalla (bien cutres hoy en día, pero entonces era el cambio de blanco y negro a color, vamos, lo más xD).
En diciembre de 2008, mi tercer móvil ya supuso un cambio más palpable, un nivel más. Esta vez me decanté por un Samsung SGH G600. Sobrio, bien equipado y con una cámara de 5 MP, además de llevar teclado slider y ganar con eso tamaño de pantalla, cuya resolución mejoraba mucho respecto del Siemens anterior, ahora sí podíamos hablar de pantalla a color de verdad.
En septiembre de 2011 di el paso más difícil para mí, meterme en el mundo de los móviles táctiles. Fui a comprarme un nuevo móvil buscando teclado físico, miré la blackberry, pero... algunas amistades me animaron a probar algo realmente nuevo, un móvil completamente táctil y la curiosidad me pudo, piqué. Así fue como llegó a mis manos un Huawei U8650 (color rojo pasión, pero no encontré fotos decentes de ese modelo), adentrándome al mismo tiempo en el mundo Android. La cámara de 3,2 MP era peor que la del Samsung, pero eso de tener por fin acceso a Internet en tu móvil, y descubrir el mundo del whatsapp compensaba :D
Pero, después de un año con el táctil, echaba de menos un teclado físico que me permitiese escribir mensajes a mayor velocidad. Aunque mucha gente se ha acostumbrado bien, yo no lo he logrado después de un año de práctica y a veces, algunas conversaciones de whatsapp que se alargaban suponían más un coñazo que un ratito agradable.
Por eso, (y por otras necesidades), busqué un móvil que pudiera satisfacerme por completo, con el sistema operativo Android (que me encanta) y con teclas físicas para escribir a gusto, y lo encontré.
Este mes de septiembre adquirí un Sony Ericsson Xperia mini Pro de color negro y estoy encantadísima con él. Combina el juego que da una pantalla táctil (con teclado táctil incluido y además en dos versiones) con la comodidad de un teclado físico además slider, que evita que el teléfono gane excesivo tamaño. Además cuenta con una cámara de 5 MP y un procesador de 1GHz con el que da gusto moverse.
Cinco han sido mis pequeños compañeros de viaje a lo largo de la última década, y seguro que vendrán algunos más en el futuro, ¿seguirán notándose cambios tan radicales como los que he vivido con los primeros cinco?... el tiempo lo dirá ;)
Es curioso cómo evoluciona la tecnología, y el márketing asociado a ella, creando necesidades inexistentes en el pobre populacho paganini que tiene que sostener las abultadas cuentas de beneficios de las telecos, integradoras, ensambladoras, desarrolladoras de software y demás.
ResponderEliminarEn mis años mozos, que tampoco quedan tan lejos, Nokia era la más importante, la más visible, empresa fabricante de móviles. De siempre, con un hardware potente, diseños impolutos, un software bastante aseado -no hace tanto que Symbian era el rey-, y una inmensa industria de accesorios, no hace falta recordar los cien mil millones de fundas para el 3310, ése icono de la era SMS de principios de los 2000. En aquel entonces, si querías ser alguien, debías tener tu 3310 u 8310, con su pantallita monocroma tan mona y sus teclados retroiluminados de colores pastel. Fue Nokia quien integró la antena en la carcasa, evitándonos tener que clavarnos la susodicha en la cadera cuando nos sentábamos con el pétreo móvil en el bolsillo. También fue Nokia quien introdujo las LCD (matriz pasiva, claro) en color, con sus bestiales 256 colores.
Ya avanzando el tiempo, Symbian se hizo mayor y apareció el S60, con las primeras aplicaciones instalables por el usuario, pero sin atisbo de tiendas de aplicaciones como ahora. Quien quería tener el super-snake tenía que bajárselo de páginas piratas, como ahora. Era la época de los N95, el máximo exponente de la época, con su pantallita tan mona y tan pequeñita, teclado slider y GPS y todo, con TomTom instalable. Por aquel entonces, las baterías duraban una semana, quien tenía internet en el móvil era un frikazo pastoso (aparte de que no habían muchas páginas adaptadas a los navegadores WAP de entonces) y uno podía agenciarse un móvil por apenas 100 euritos.
Pero llegó el 2007, mientras Nokia seguía reinando sin amenazas en el horizonte. El puto Steve Jobs, tan porculero como siempre, se le ocurrió el tal iPhone y revolucionó el tema, al principio la gente se cachondeaba de él y de su ausencia de teclado físico -que nunca ha llegado a desaparecer del todo, aún estamos, por suerte, lejos de la uniformidad total en cuanto a gustos, le pese a quien le pese-. Se inventó un sistema operativo derivado de MacOS X, a su vez derivado de Linux, a su vez derivado de Unix. Un SO táctil total, sin necesidad de usar joystick o teclas físicas (al final todos han caído, hasta Android y Windows). Con hileras de iconitos muy arregladitos, y con el gran pelotazo que supuso integrar una tienda de aplicaciones que marcó el camino a los seguidores, Google incluído. Es de justicia decir, por muy hater o fanboy que sea uno, que las buenas ideas son como los buenos genes o los memes, conquistan y machacan al resto por pura inercia y éxito y el que no se adapta, muere. Simplemente.
A raíz del tsunami iPhone, Google tuvo que acelerar el desarrollo de Android, por un puro tema económico, ya que el pastel móvil es muy goloso y todos quieren su tajada, y el único objetivo de cualquier compañía es la hegemonía, destruir a sus rivales y reinar ad aeternum, en eso están ahora Apple vs Google, Samsung, LG, Microsoft y demás. Es un todos contra todos, y lo bueno es que no tienen más opciones que innovar y ahí salimos ganando los geeks wannabee que pasamos el rato jugando con estos aparatitos. Lo que decía, Android aparece en escena, pero se impone el formato sólo tactil iPhone, y empieza la guerra. Google, aparte de desarrollar Android, se alía con fabricantes hardware (de momento, HTC, Samsung y Asus) para ofrecer productos integrados Apple-style. El Android Market empieza a tener una buena cantidad de aplicaciones y mucha gente se pasa o entra en el mundo en el bando Google, ya que Android es y sigue siendo libre y cualquier fabricante puede personalizarlo e integrarlo en sus productos. Es la típica estrategia viral que tanto triunfa a veces, siendo Linux el caso paradigmático.
(sigue)
(viene de arriba)
ResponderEliminarEstamos ya en 2009, y esta guerra pilla a Microsoft, el amo de los SO de escritorio, con el paso cambiado. Cierto es que Windows CE es un primer intento de SO para PDAs, pero las PDA de la época (también tengo una, una auténtica reliquia que aún funciona) eran aparatos muy minoritarios, con un uso casi exclusivo de organizador personal, con WiFi en casos muy raros y la poca conectividad era sincronización Outlook vía USB. Eran aparatitos para llevar la agenda programada el día anterior, y como mucho meterle un TomTom si el aparato llevaba GPS integrado. Entonces MS empieza a desarrollar Windows Phone, el tercero en la contienda. Ha llegado tarde, tiene una cuota de mercado baja y pocas aplicaciones, y no tiene hardware, ya que MS nunca lo ha sido más allá de teclados y ratones de muy buena calidad.
Y se junta el hambre con las ganas de comer. Nokia destronada y vagando por el desierto, MS con un proyecto de SO móvil pero sin teléfonos donde instalarlo y venderlo, más allá de modelos minoritarios de HTC. Se conocen y es un flechazo, Nokia tiene un buen equipo de ingenieros, montan terminales de muy buena calidad y MS tiene el relleno para esos móviles. Han tardado un tiempo pero los Lumia son bicharracos considerables, con un hardware envidiable y un WinPho 8 muy usable, a falta de que las apps vayan creciendo poco a poco. Quien esté harto de Android o iOS tiene una buena alternativa para probar.
Mientras pasa todo esto, Google y Apple siguen en guerra, guerra sin cuartel, con patentes de por medio, copiándose unos a otros, litigando, diciéndose de todo... e innovando y sacando aparatos cada vez más potentes y funcionales. De momento la guerra está entre Apple y Samsung, ya que los primeros consiguen patentes absurdas y Samsung tiene un equipo de abogados aburridos que se dedican a tocarle los güitos a sus compis californianos. Samsung bebe de la teta Googliana, muy prolífica, y actualmente están un puntito por encima de Apple. Valga como muestra el semi fiasco del iPhone 5. Un puntito por debajo en software (Android 4.1.1 es glorioso), un puntito por debajo en hardware (menos pantalla, menos dpi, menos procesador) y lo que es más importante para la gentuza como el que escribe esto: es muy poco modificable y juankeable. Que levanten la mano los poseedores de iPhone con widgets en pantalla y versiones aftermarket de iOS. Pues eso.
En mi opinión, estamos en la edad dorada de los SO móviles. Esto al final acabará en una integración y desdiferenciación total y absoluta entre sistemas móviles y de escritorio, con el primer y gran paso que ha dado MS con Windows 8 y sus Surface -primera incursión de MS en el hardware total-, así que disfrutemos de nuestros Windows 7, nuestros androides de dulces apellidos y critiquemos, aunque no siempre tengamos la razón, a la turba fanboyística applera/maquera. Pero que no se ofendan los tenedores de iPhones, las guerras comerciales repercuten positivamente en los usuarios y si no fuese por iPhone, aún llevaríamos Nokias con S90 probablemente.
Perdón por el ladrillo :D
Impresionada me hallo por su gran exposición en mi blog :D menudo repaso a la situación de las empresas implicadas en el mundo de la telefonía móvil.
ResponderEliminarYo nunca me he enterado mucho de lo que hay más allá de los modelos que venden :D pero al final es lo que más nos afecta, el cacharro que cada una nos ofrece a los consumidores, que como bien dices tú, cuanta más guerra entre ellas, mejor para nosotros xD
Halagado me hallo, ama y señora del blog :)))
ResponderEliminarLa verdad, detallar toda esta historia requeriría de un buen libro, yo apenas he rascado la superficie. Además, no tengo n.p.i., sólo leo algún blog que otro.
Si haces una sección tesnolojika en el blog, me apunto como redactor :D